Durante 2020, colaboramos con ocho proyectos de Cáritas Española, con el objetivo de apoyar las acciones de atención de colectivos en situación de vulnerabilidad. Los proyectos apoyados fueron:

• PROYECTO DENTRO DEL PROGRAMA DE INFANCIA, ADOLESCENCIA Y FAMILIA: Cáritas Diocesana de Albacete intervino en barrios con núcleos de viviendas de escasos recursos económicos, precariedad laboral y con bajos niveles formativos y culturales. El objetivo del proyecto consistió en un proceso socioeducativo para conseguir el bienestar de dicha comunidad.
• PROYECTO DE ACOMPAÑAMIENTO SOCIOEDUCATIVO CON NIÑOS Y ADOLESCENTES: Cáritas Diocesana de Mérida Badajoz, desarrolló una intervención socioeducativa con menores en riesgo de exclusión social. El proyecto estuvo dirigido a la protección y desarrollo personal/social de estos menores, incidiendo en el reconocimiento, la defensa y el acceso de sus derechos fundamentales.
• PROYECTO CREANDO REDES CONTRA LA PANDEMIA: Desde el Centro de Cáritas Diocesana de Segorbe Castellón se realizó un proyecto que consistió en el acompañamiento y apoyo a los Equipos del territorio –las Cáritas Parroquiales, Inter parroquiales y Arciprestales– para el fortalecimiento de sus acciones y transformar la realidad social de personas en situación de vulnerabilidad.
• PROYECTO CASA DE ACOGIDA LUZ RODRIGUEZ CASANOVA. RESURGIR: El proyecto de Cáritas Diocesana de Oviedo tiene como objetivo acompañar, de manera integral, a las personas en situación de sin hogar favoreciendo que tengan acceso y titularidad en sus derechos fundamentales de salud, vivienda, empleo, participación, educación y justicia, de forma que se promueva su progresiva inclusión social. Este recurso proporciona estabilidad, poniendo a disposición de la persona un alojamiento estable para poder diseñar conjuntamente un plan personal de incorporación social que comprenda una serie de objetivos a conseguir, unas actividades a realizar y unos compromisos concretos.
• PROYECTO COMEDOR SOCIAL “CASA BETANIA”. Desarrollado por Cáritas Diocesana de Plasencia, pretendió mejorar la situación de emergencia en la que se encuentran las personas y familias a través de la acogida y el comedor social como punto de partida para iniciar procesos de recuperación con las personas y familias.
• PROYECTO ACOGIDA Y ATENCIÓN A PERSONAS CON VIH. El programa de Cáritas Salamanca da respuesta a personas afectadas por VIH que precisan ayuda de tipo externo para afrontar su situación personal, familiar y/o social; principalmente a personas que se encuentran en situación de exclusión social y/o vulnerabilidad, atendiendo tanto a personas que residen en sus propios domicilios, como personas sin hogar que precisan un recurso específico como es la Casa de Acogida. La acción se concreta en dos ámbitos de actuación que se complementan y dinamizan: Intervención Comunitaria y la Casa de Acogida Samuel para enfermos de VIH.
• PROGRAMA ANA de prevención y atención de las violencias machistas en Cáritas Diocesana de Valladolid, está destinado a la prevención y la atención integral de las violencias machistas a través de la sensibilización, educación y formación de mujeres en situación de desigualdad y la detección precoz de situaciones de violencia de género, así como acciones de intervención directa con mujeres (asistencia social, psicológica y jurídica, atención preferente a familias con menores, víctimas de violencia de género y mujeres en riesgo, apoyo residencial para la recuperación personal y familiar a través de una casa de acogida)
• CÁRITAS ANTE EL CORONAVIRUS: La extraordinaria situación obligó a Cáritas a reorganizar y redimensionar la actividad que venía desarrollando, apoyando a las Cáritas Diocesanas que se encontraban en una situación de crisis y de replanteamiento de muchos de sus servicios y programas. Durante la pandemia, Cáritas acompañó y ayudó a las personas más vulnerables para quienes la enfermedad supuso un riesgo aún mayor. La actuación se centró en atender a los colectivos con un mayor riesgo sanitario y social: personas mayores, personas sin hogar y familias en situación de vulnerabilidad.

A través de la colaboración de la Fundación ADEY, Cáritas adquirió más de 17.000 unidades de guantes, mascarillas, termómetros, desinfectantes de superficie, geles hidro-alcohólicos y batas de cirujano de alto riesgo.